Con los cielos sin compartir y el río sin ceder, algunas ciudades del Valle están comenzando a buscar más agua bajo tierra.

El tratamiento de aguas subterráneas es limitado en el Valle. Pero ya lo están haciendo dos empresas de servicios públicos: la Junta de Servicios Públicos de Brownsville y la Corporación de Suministro de Agua de North Alamo. Este último cubre un área amplia, en gran parte rural, que abarca 1000 millas cuadradas, incluidos los alrededores de Edinburg, Donna y el área del Delta.

El agua subterránea es naturalmente salada, lo que requiere tratamiento y filtración. La Corporación de Suministro de Agua de North Alamo usa ósmosis inversa, es más costosa, tanto en términos de efectivo como de electricidad”.

"Se necesita más energía... Yo diría que entre un 30 y un 40 % más de energía", dijo el gerente general de Alamo Water Supply Corporation, Steve Sanchez. "El agua cara es mejor que no tener nada de agua. Los hidrogeólogos dicen que hay mucha agua subterránea salobre aquí lo que nos durará por los próximos 100 años o más".

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